La destacada cantante guatemalteca Beatriz Manzo, universalmente conocida como Paquita de Guatemala, celebra sus 40 años de carrera artística en los escenarios.
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La artista Beatriz Manzo, conocida en los escenarios como Paquita de Guatemala, celebra sus 40 años de carrera artística, un recorrido marcado por esfuerzo, identidad y una conexión con la música ranchera.
Manzo inició su recorrido musical a los 26 años, aunque su amor por el canto comenzó desde la niñez. Creció en una finca donde escuchaba una pequeña radio celeste de plástico que la acompañó durante años. De niña, creía que las voces que oía vivían dentro del aparato e imaginaba que algún día la saludarían.
Ella no participaba en actividades porque no encontraba apoyo para hacerlo. Pero su vida cambió cuando conoció a Manuel Álvarez, quien la llevó por primera vez a eventos sociales donde empezó a presentarse.
En ese tiempo era anunciada como Beatriz Manzo, la voz ranchera de Guatemala. Pero un viaje a México transformó por completo su vida artística.
En México descubrió a Paquita la del Barrio, y desde entonces adoptó su estilo y comenzó a interpretar sus canciones. Se identificó con la fuerza, el dolor y el coraje que transmitía la cantante mexicana.
A lo largo de su carrera, Paquita de Guatemala ha combinado la música con el humor, pues además de cantar, da espectáculos de parodia que suelen arrancar aplausos y risas del público.
También ha escrito sus propias canciones y participado como actriz en diversas producciones. La han invitado a eventos en El Salvador y México, donde ha representado al país con orgullo.
Desahogo y emociones
Paquita de Guatemala reconoce que parte de su fuerza viene de experiencias dolorosas. Sufrió violencia de una expareja y ese episodio marcó su vida y su arte.
"Me cansé de besar ratas", cuenta, explicando por qué muchas de sus interpretaciones van dirigidas a los "inútiles" que dejó atrás. A diferencia de otras artistas del género, dice que no canta tanto al amor, sino al dolor, y también interpreta a figuras como Chelo Silva y Jenni Rivera.
Uno de los momentos más importantes de su trayectoria fue conocer personalmente a Paquita la del Barrio, un encuentro que recuerda con emoción. Pese a cantar historias de sufrimiento, asegura que en su vida diaria es una mujer feliz y agradecida por todo lo que ha logrado.
Tras cuatro décadas en los escenarios, Paquita de Guatemala quiere seguir cantando "hasta que Dios se lo permita". Y le agradece al público que la acompaña con sus aplausos en cada presentación.
