El primer paso es la aceptación. Ya no tienes 20 años, tu cuerpo no es el mismo y tu metabolismo tampoco. El cuerpo está en continua transformación, así que es lógico que la dieta tiene que estarlo también.
Es momento de concentrarte en contribuir a los nuevos y buenos hábitos alimenticios y así hacer crecer tu buena salud y tu esperanza de vida. Llevar una dieta cualquiera puede tener efectos de rebote o simplemente que no den resultados.
- OTRO TIP:
A medida que pasan los años, el metabolismo se desacelera y se pierde masa muscular. Pero no todo está perdido, simplemente tienes que empezar a seguir los trucos adecuados para adelgazar a tu edad.
¿Qué comer a los 30 años?
La responsabilidad del trabajo y de la independencia te mantienen ocupado y menos activo, lo que puede reducir tu energía y metabolismo y hacerte ganar peso más fácilmente. Y cuanta más grasa, mayor será tu presión arterial. Tu tarea es comer una dieta equilibrada y varios refrigerios a lo largo del día.
La elección de una dieta adecuada es fundamental para prevenir problemas arteriales, sobre todo si tienes predisposición genética a tener la tensión elevada. La mayoría de los casos, esto puede controlarse mediante cambios en los hábitos de vida.
Angel Planells, portavoz de la Academia de Nutrición y Dietética de EE. UU., menciona que es una obligación consumir muchas verduras de temporada ricas en potasio.
Además, debes comer ajo y cebolla, perejil, berros, zanahorias, col, espinacas, tomate y pepinos; así como legumbres, cereales integrales y pescado azul.
Por otro lado, es preferible que evites cereales y harinas refinadas, leche y derivados, carnes rojas, grasas saturadas (como la mantequilla o la grasa de cerdo), alcohol, azúcar, embutidos, café y especias como pimienta y curry.





