El padre de Angie Caseros culpa a su otra hija del crimen.
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Luis Caseros, padre de una mujer acusada de asesinar a su media hermana y su madrastra hace dos años, en la zona 18, declaró en el juicio que se desarrolla para esclarecer el caso.
"Dios te perdone, Katherine", dijo el hombre, quien declaró por videoconferencia, al referirse a su hija y sospechosa del crimen, Katherine Alexandra Caseros.
El señor narró los problemas que mantenía la familia con la ahora procesada y su pareja sentimental. Asimismo, recordó que un día antes del asesinato de su esposa, Blanca Ramírez, y su otra hija, Angie Caseros, Katherine llegó a su vivienda.
Según dijo, eso era algo extraño, pues la mujer no tenía permitido ir al lugar, debido a los conflictos existentes por una propiedad. "Ella no fue sola, estaba acompañada de otra mujer", expresó, y confirmó que se trata de una de las señaladas en el caso.
Luis Caseros dijo estar seguro de que su propia hija participó en la muerte violenta de Blanca y Angie, y exigió que se haga justicia, aunque eso implique a Katherine.
Presentan pruebas
Durante la audiencia de este miércoles 25 de octubre, el Ministerio Público (MP) también presentó algunas evidencias de la presunta participación de la mencionada mujer y otras personas en los asesinatos.
Los pares de un arete y un zapato que se localizaron en la escena del crimen se habrían ubicado en la casa de una de las acusadas, informó el ente investigador. Además, dijo que se cuenta con otros indicios que han sido estudiados por peritos.
Cabe recordar que hay otras dos mujeres y un hombre sindicados en los hechos. Juntos habrían planificado y ejecutado un plan que terminó con la vida de Blanca y Angie, según el MP.
Así ocurrió
De acuerdo con la fiscalía, las víctimas llegaron a casa de Katherine, bajo engaños. Esto habría sido aprovechado por los cuatro presuntos implicados para secuestrarlas y luego asesinarlas.
El primer reporte de la necropsia, realizada por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), determinó que ambas murieron de asfixia por estrangulamiento.
Los cadáveres fueron abandonados en una cuneta en la entrada a la colonia Las Lumbres, en la zona 18, en un camino a San Pedro Ayampuc. Socorristas los rescataron el 8 de septiembre de 2021.