31 de diciembre de 2014, a pocos minutos de terminar el año, escuchando música de fondo uno y un montón de recuerdos, familia, risas, un jamón serrano, la pierna que nos quedó deliciosa, el vodka que me preparó él y que comparto con la prima, anécdotas y empezó la cuenta atrás.
No dejo de pensar en los propósitos del 2015, son tantos y no me enfoco en nada, quiero todo y no sé por dónde empezar, se me hace bolas la mente y no puedo concentrarme en lo que quiero… 5, 4, 3, 2 , 1…. ¡Feliz Año!!! nos levantamos de la mesa y no dimos todos el abrazo mientras sonaba de fondo “Yo no olvido el año viejo…” y es que así me pasa a mí, yo no olvido el año viejo porque me ha dejado cosas muy buenas.
Brillan los fuegos artificiales por el cielo, cada uno pienso debe ser un deseo, una promesa, una idea, un sueño o una ilusión, así como cada día del año que viene.
No dejé de hacer la lista en mi mente, tuve del 1 al 5 de enero para pensar qué quiero del 2015. Durante estos días tuve señales y reflexiones para decidir qué. Una de ellas fue un dandelion que se encontró mi pequeña maravilla mientras caminábamos juntas, y pensé “así se pasa la vida”, soplas y salen volando por el aire sin rumbo definido y nos vuelven atrás.
Hoy empiezo a entregar mis propósitos en el Día de Reyes y coincido en un único deseo: la salud. Con salud puedo tener la oportunidad de gozar del resto que se viene.
Este año voy a:
- Entregarme más a los planes de Dios aceptando su voluntad y no la mía
- Hacer más tiempo para jugar más con mis hijas
- Dedicar más tiempo para compartir más sueños junto a él
- Escribir más de lo que la vida me da
- Regañar menos y gozar más de las travesuras o desastres de mis hijas
- Llamar más seguido a mi familia en el extranjero
- Desvelarme menos y dormir más
- Comer más verduras que arroz y pan
- Tomar más agua pura que refrescos con azúcar, eso incluye mi Coca Zero
- Pasar más tiempo con mis amigas
- Juzgar menos y aceptar más a los demás
- Quejarme menos y disfrutar más de lo que la vida me dé
- Descubrir nuevos talentos que vengan de mí
- Leer más, por lo menos un libro al mes
- Desentenderme más de las cosas que no tienen importancia
- Escuchar más de lo que otros opinen y opinar menos
- Imaginar y planear más sueños por cumplir
- Quejarme menos del poco tiempo que tengo y a aprovechar más el que tengo
- Enseñarle a montar bici a mi pequeña maravilla
- Continuar ese libro que dejé escrito a medio camino
- Criticar menos lo que no me gusta de mi país y resaltar más lo que me gusta
- Dar más gracias de las que me den a mí
- Ir y conocer algún lugar en el que no haya estado nunca antes
- Hablar más con aquella persona que dejé en el olvido
- Cuidar más mi salud que antes
- Quitar de mi cuerpo eso que no me gusta
- Correr los kilómetros que sean necesarios y quitarme las libras que me sobran
- Entrenar mental y físicamente lo suficiente
- Salir a caminar una vez por semana con la familia
- Comprar mi casa
- Abrazar más de lo que me puedan abrazar a mí
- Soñar despierta
- Cantar y bailar más sin motivo alguno
- Usar menos el chat
- Usar más las gradas que el elevador
- Amar completamente
- Salir de mi zona de confort para probar nuevos retos
- Actuar más y decir menos “hubiera”
- Ver más hacia adentro y menos hacia afuera
- Como diría mi amiga Stefani, voy a vivir sin límites para ir más allá de donde yo creía poder llegar
Me acompañan?
~N





