El exportero Rogelio Flores opinó sobre la responsabilidad de Nicholas Hagen en el gol del empate 'in extremis' en la visita de la Selección a Surinam en el rumbo al Mundial de 2026.
Otras noticias: Tena se plantea ganar lo que resta de la eliminatoria
Nicholas Hagen fue el protagonista involuntario del empate de la Selección en Surinam, tras un rechazo que terminó en el gol rival. En el último minuto del tiempo agregado, salió a despejar con los puños, pero la pelota quedó cerca de la media luna.
Jean-Paul Boetius se combinó con Misidjan para sacar un potente derechazo que, tras deslizarse entre un mar de piernas, se coló en la red, apagando la celebración chapina.

El portero fue cuestionado por la forma en que despejó. Consultado por Nuestro Diario, el exguardameta y actual preparador de arqueros Rogelio Flores explicó: "En los análisis de porteros, lo primero que se recomienda es que los puños se dirijan hacia las orillas, pero la velocidad, el tiempo y la distancia a veces no permiten cumplir la técnica al pie de la letra".

Flores agregó que Hagen no tuvo otra opción y trató de mandar el balón lo más lejos posible. "Lo ideal habría sido enviarlo a los costados, pero dadas las condiciones, balón mojado, tiempo y distancia, no le quedó más alternativa", refirió.
Finalizó señalando que "si hubiera habido un reboteador de nuestra parte, debía estar más cerca para evitar la situación de gol.




