Gabriela Corleto, flautista de la Orquesta Sinfónica Nacional, combina disciplina y pasión con más de 20 años de trayectoria.
LEE TAMBIÉN: Jefferson Hernández rompe barreras en el levantamiento de pesas
Gabriela Corleto Orantes, tiene 41 años, y ha dedicado más de 20 años a la Orquesta Sinfónica Nacional de Guatemala, donde no solo interpreta la flauta traversa, sino también resguarda su archivo musical, pieza clave en cada ensayo y concierto.
Desde niña, estuvo rodeada de arte. Hija del dramaturgo y escritor Manuel Corleto y de una madre actriz, Patricia Orantes, creció entre obras de teatro, conciertos y escenarios.

La música, siempre presente en su hogar, despertó en ella una vocación temprana. A los 6 años, presenciar una obra de Joaquín Orellana marcó su amor definitivo por este lenguaje sonoro.
Aunque primero quiso aprender a tocar el piano, fue el sonido de la flauta traversa lo que la conquistó mientras recorría los pasillos del Conservatorio Nacional siendo una adolescente.

"Fue una conexión instantánea. Me enamoré del sonido desde el primer instante. Me gusta porque es simple, práctico, pero sobre todo, porque suena hermoso", indicó.
Su paso por la Orquesta Juvenil Jesús Castillo le confirmó que quería dedicar su vida a la música. Su formación incluye estudios en el Conservatorio, un profesorado, una licenciatura y una maestría en flauta.

Actualmente, continúa formándose con clases virtuales, convencida de que "la música es inagotable" y que nunca se deja de aprender.
A quienes desean dedicarse a este arte, les aconseja no dejarse vencer por el miedo: "Sí, se puede vivir de lo que uno ama. Pero requiere disciplina, constancia y entrega total".






