Existe un puente que sirve como vía directa para unir el centro de la ciudad con el Anillo Periférico, este es el puente El Incienso, que se caracteriza por la densa neblina que lo rodea muchas veces por la mañana.
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Durante la primera mitad del siglo XX la ciudad de Guatemala no dejaba de crecer y dejó de ser esa "Tacita de Plata" que abarcaba la zona 1 y algunas zonas más, para convertirse en una ciudad moderna y en pleno desarrollo.
Las décadas pasaban y también los gobernantes. Muchos fueron testigos del gran crecimiento de la ciudad y de la necesidad de crear grandes arterias para la circulación de vehículos, además de puentes para unir ciertos puntos de la ciudad separados por barrancos.
Un punto realmente importante era donde se unían las zonas 1, 2 y 3, pues ahí había una gran cantidad de viviendas, pero no un puente que conectara a esta parte de la población con la zona 7 y el área de El Naranjo, en Mixco.

Esto llevó a muchos gobernantes a proponer la construcción de un puente, pero no fue hasta la administración del entonces presidente Carlos Arana Osorio que se pusieron manos a la obra. El encargado de hacer este proyecto realidad fue el entonces alcalde capitalino, Manuel Colom Argueta.
Con una inversión total de casi Q5 millones, el puente Martín Prado Vélez se convirtió en una realidad y fue inaugurado el 26 de junio de 1974.
Con esta obra, la ciudad de Guatemala empezó a gozar de un tráfico más fluido y una conexión que podía unir la ruta al Atlántico con la ruta Interamericana sin tener que pasar por el centro de la ciudad.

Densa neblina
El nombre Martín Prado Vélez se le colocó al puente en honor al ingeniero que estuvo a cargo de la alcaldía capitalina durante los gobiernos de la época revolucionaria y que falleció tres años antes de la inauguración de la estructura.
A pesar de que este personaje era muy conocido en aquel entonces, la gente rápidamente empezó a llamar al puente con el nombre de El Incienso, esto debido a la gran cantidad de neblina que emerge desde el barranco por las mañanas y que envuelve a esta enorme estructura de acero y concreto.
Hasta la fecha, es común ver al puente envuelto en neblina si uno lo atraviesa durante las primeras horas de la mañana y este es una de las conexiones más importantes que posee la capital.




