Un pequeño de 12 años cayó en un pazo en Quetzaltenango y tras varios minutos de trabajos, el menor fue rescatado.
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Nelson Corado, de 12 años, vivió una pesadilla la noche del lunes 30 de junio al caer accidentalmente a un pozo artesanal de más de 12 metros de profundidad, ubicado dentro de su vivienda en la zona 2 de Coatepeque, Quetzaltenango.
El menor fue rescatado con vida por los Bomberos Municipales. El accidente ocurrió mientras Nelson jugaba con otros niños en el patio de la casa. En un descuido, pisó una delgada lámina que cubría el agujero en construcción, la cual cedió por su peso y lo dejó caer al fondo.
Durante más de una hora permaneció sumergido en el agua, en condiciones críticas. Los socorristas se movilizaron al lugar con dos unidades de rescate y con la ayuda de cuerdas y cables, descendieron al pozo y lograron sacar al niño con vida.
Nelson presentaba golpes en la cabeza, heridas cortantes en las extremidades y el abdomen, además de un cuadro severo de hipotermia. Fue trasladado envuelto en una manta térmica al hospital nacional Juan José Ortega, donde quedó internado bajo observación médica.
Según familiares, el pozo estaba en construcción y solo había sido cubierto de forma provisional. El incidente pudo haber terminado en tragedia, como ha ocurrido con otras víctimas: en lo que va del año, cuatro personas han caído a pozos artesanales en este municipio; una de ellas perdió la vida.
