A los 16 años sufrió un accidente automovilístico y desde entonces ya no despertó.
EN CONTEXTO: Muere el "Príncipe Durmiente" tras estar dos décadas en coma
Al-Waleed bin Khaled bin Talal, conocido como el "Príncipe Durmiente" de Arabia Saudí, murió el pasado sábado después de permanecer 20 años en coma.
El caso del joven saudí, miembro de la Casa Real, se hizo mediático luego de que sufriera un grave accidente cuando apenas tenía 16 años.
Desde su trágico accidente permaneció 10 años en la unidad de terapia intensiva en un hospital en Riad. Luego, fue trasladado a la residencia familiar, según detalló en su momento El Mundo, donde falleció 10 años después.

Durante un tiempo corrieron varios rumores sobre su supuesta muerte, pero la familia de inmediato salió a desmentir la noticia publicando un video donde se le ve respirando y moviendo la cabeza.
الحافظ القادر الرحمن الرحيم . الوليد بن خالد يحرك رأسه من الجهتين ، يارب لك الحمد والشكر . pic.twitter.com/bLC7lYbmpN
Su padre, príncipe Khaled bin Talal, siempre se negó a desconectarlo sosteniendo que algún día ocurrirá un milagro que le permitiría "recobrar la vida", sin embargo, ese día nunca llegó.
والدي الغالي يتطمن على حبيبنا الوليد بن خالد شفاه الله pic.twitter.com/XuSrE9bDVb
¿Quién era Al-Waleed?
Nació en 1989, pertenecía a una influyente familia real saudita. Era bisnieto del rey Abdulaziz, fundador del reino. A los 16 años fue enviado a estudiar a una academia militar en Reino Unido, siguiendo la tradición de las élites saudíes.
Era sobrino del multimillonario Al Walid bin Talal, el más atípico y liberal de los príncipes saudíes, con millones de seguidores en las redes sociales.
Al Walid es dueño de Kingdom Holding, la sociedad que agrupa activos repartidos en varias partes del mundo con una riqueza que la revista Forbes calcula en 17 millones de dólares. Tiene participaciones en Apple, Twitter, Citigroup, Four Seasons o Disney.




