Fugas de aguas y malos olores pueden prevenirse si las tuberías de tu vivienda están en buenas condiciones
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El buen estado de las tuberías de todo inmueble es fundamental para garantizar el bienestar y la seguridad de sus ocupantes, principalmente si se trata de una vivienda.
Muchas veces, por no ser piezas que están a la vista, no se les da mantenimiento, hasta que aparece una fuga, un mal olor o una inundación inesperada.
Cuidar dichos ductos, tanto de agua potable como de aguas residuales, no solo previene estos problemas, sino que también representa ahorro de dinero y ayuda a cuidar la infraestructura de los inmuebles.
Luis Salazar, representante de una ferretería, refirió que es fundamental realizar buenas instalaciones de tuberías y, sobre todo, cuidarlas.
Evitar arrojar grasa, restos de comida o productos químicos por el fregadero o el inodoro, ayuda a que las cañerías no se obstruyan.
Los atascos son una de las fallas más comunes y pueden requerir costosos trabajos de plomería si no se atienden a tiempo.
Otro aspecto importante es revisar periódicamente el sistema de tuberías, sobre todo en casas antiguas, pues con el paso de los años, los materiales pueden deteriorarse y corroerse.
Recomendaciones
- Evita arrojar grasa por el fregadero
- No tires objetos sólidos al inodoro
- Instala rejillas o filtros en los desagües
- Limpia regularmente los sifones y coladeras
- Evita el uso excesivo de productos químicos
- Revisa la presión del agua
- Atiende las filtraciones de inmediato
- Haz mantenimientos preventivos
- Aísla las tuberías expuestas en climas fríos
- Conoce la ubicación de la llave de paso
