Descubre cómo Xela fue nombrada ciudad en 1825, su evolución histórica y el decreto que marcó un hito en la Cuna de la Cultura
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Quetzaltenango se prepara para celebrar un hito trascendental en su historia: el bicentenario de su nombramiento como ciudad.
Dos siglos han pasado desde que la Cuna de la Cultura asumió la responsabilidad de crecer y consolidarse como una ciudad referente, con espíritu de progreso en distintos ámbitos.

El 29 de octubre de 1825, la Asamblea Constitucional de Guatemala otorgó este título a través del Decreto 63, reconociendo la importancia y el peso que Xela había alcanzado en la época.
Este decreto entró en vigor el 12 de noviembre del mismo año. El carácter de ciudad fue posible gracias al progreso y la relevancia que la región había adquirido desde hace 200 años.

El principal impulsor de la propuesta fue el diputado José Flores, mientras que su hermano, Cirilo Flores, junto con Manuel Montúfar y Laureano Nova, desempeñaron un papel clave en este hecho histórico. En ese periodo, el Estado estaba bajo el liderazgo de Juan Barrundia.

El libro Recopilación de las leyes de Guatemala, de Manuel Pineda Mont, detalla el hecho histórico. "No. 301 Ley 2a. Decreto de la Asamblea Constituyente de 12 de noviembre de 1825, confiriendo los títulos de ciudad a las poblaciones que expresa. 1. El pueblo de Quetzaltenango se denominará en lo sucesivo Ciudad de Quetzaltenango".

Cabe resaltar que en sus inicios, la ciudad se conocía como Quezaltenango. Fue hasta 1984, mediante decreto presidencial del general Óscar Humberto Mejía Víctores y gracias a las gestiones impulsadas por el alcalde Guillermo Martini Zimeri, que se incorporó la letra "t" a su nombre. Desde entonces, tanto el municipio como el departamento adoptaron oficialmente el nombre de Quetzaltenango.
A poco de cumplirse dos siglos de aquel reconocimiento, Xela no solo recuerda su pasado, sino que celebra la fuerza de su gente, su herencia cultural y su visión de futuro.
Crecimiento exponencial
- Debido a su importancia, Quetzaltenango no pasó por el título de villa, sino que obtuvo directamente el de ciudad.
- "Este título debía haberse otorgado desde antes, pero por envidias y rencillas políticas y económicas no se le habían concedido", explicó el historiador Óscar Soto.




