Taquito es uno de tantos perritos usados como mercancía por algunos comerciantes sin escrúpulos que inician crianza de canes como negocio, dándoles mal trato y condenándolos a una vida en jaulas.
El chichuhua fue decomisado por agentes de la Municipalidad de Guatemala, a partir de ello vive en el Albergue Municipal de Mascotas, institución que peleó su custodia hasta ganar el caso.




