El conflicto en Ucrania ha activado en Alemania un debate a favor del traslado del Mundial de Rusia 2018 y representantes de los partidos gubernamentales germanos han pedido que el torneo se traslade a su país.
El presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Wolfgang Niersbach, expresó su preocupación por la escalada de violencia en Ucrania y la vinculación de Rusia con ese conflicto.
"No se puede celebrar un Mundial en un país envuelto en una guerra con otro país", apuntó asimismo a ese rotativo Karl-Georg Wellmann, experto en política Exterior de la Unión Cristianodemócrata (CDU) que preside la canciller Angela Merkel.
Alemania, actual campeón del mundo, sería una buena alternativa para acoger ese torneo, prosigue ese político, que apunta a la posibilidad de que fuera una sede compartida con Polonia y Ucrania, organizadoras de la Eurocopa de 2012.





