Cualquier día es un buen pretexto para disfrutar de un platillo típico de la región, o bien para pasear a cualquiera de los lugares que ofrece Villa Canales, cercano a la capital de Guatemala.
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Lo mejor de la gastronomía canaleña es el tradicional caldo de Chirín que lleva carne de res, gallina y pescado, así como verduras y huevos, entre otros ingredientes.
Es un invento de varios hombres que para días de asueto iban a la orilla del lago de Amatitlán a pescar y cada quien llevaba algo para aportar. Un día cocinaron todo junto y de ahí nació este delicioso cocido.
Además, el paladar se deleita con unos churros con chocolate, torrejas, dobladas, pupusas y tacos, acompañados con atol de arroz en leche o de plátano sin olvidarse de los elotes locos. Estos se consiguen en la propia feria o en el parque central.
Y qué decir de los lugares para ir a disfrutar del paisaje, la combinación de los volcanes, las montañas, el lago de Amatitlán y los cultivos de café, caña de azúcar, piña o jocote.
Por ejemplo, está Orantes, un sector para ir a sentarse con la familia o los amigos y disfrutar de la brisa a la orilla del lago. Lado opuesto y similar al anterior está el lugar conocido como el Relleno.
Para llegar hay que situarse en la vuelta al lago, pasar por la colonia Brisas del Valle, cruzar a la izquierda hasta llegar el fondo.
Otro lugar muy bello es El Mirador ubicado en el kilómetro 29.5, camino a la aldea Santa Elena Barillas. Desde aquí se puede ver el lago de Amatitlán, los Cerros Chinos, una parte del parque La Cerra y algunos volcanes.
Y si la elección es la religiosidad, entonces se puede acudir a las iglesias de Santa Elena Barillas, Boca del Monte o la del centro urbano de San Joaquín. Todas, con un grano de historia de este municipio, ubicado en el sur del departamento de Guatemala.
