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Un contrato de arrendamiento es un documento legal que incluye la información del dueño de la propiedad, las condiciones del alquiler y firmas.
En Soy 502 te damos algunos consejos a tomar en cuenta antes de firmar y aceptar todas las condiciones del documento:
- Es importante que todo lo que hablen esté escrito en el contrato: este tipo de documentos no es verbal, debe quedar escrito por un juez y firmado por las dos partes. En caso de que alguien tenga algún problema o no cumpla con lo estipulado, puedes demandar.
- Leer el contrato: si no se revisa el escrito y es la otra parte quien lo ha redactado, cabe la posibilidad de que no aparezca todo lo que el inquilino desea. Recuerda que si no estás de acuerdo con alguna cláusula puedes hablarlo antes de firmar el contrato.
- Revisar la casa: algunas veces la vivienda que se va a alquilar no está en muy buenas condiciones; está habitable pero tiene alguna grieta, desperfectos, el sistema eléctrico falla o las tuberías se atascan. Si el inquilino acepta entrar vivir aunque la casa tenga algunas fallas, debe dejar por escrito en el contrato los desperfectos que presenta la vivienda y así asegurar el regreso de tu depósito.
- Fijar la forma de pago: en el contrato siempre debe aparecer la manera en que se van abonar las mensualidades del alquiler. El ingreso en la cuenta bancaria del arrendador es una de las más cómodas.
- Consultar con un experto: si no entiendes los términos con los que está escrito el contrato, no dudes en pedir ayuda a un experto o familiar que tenga experiencia en el tema, así te aseguras de firmar un papel que sabes perfectamente de lo que habla.
- Dar por sentado algo que no aparece por escrito: en los contratos no hay que dejar nada al azar y todo debe estar plasmado pues, como se suele decir, las palabras se las lleva el viento.
