La guerra comercial del presidente Donald Trump está afectando a los consumidores estadounidenses de manera significativa.
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Debido a los aranceles impuestos por Donald Trump a las importaciones chinas, los barcos que llegan a puertos estadounidenses procedentes de China están sujetos a enormes aranceles, lo que ha llevado a una disminución drástica en las importaciones.

Las importaciones procedentes de China han disminuido un 35% en comparación con el mismo período del año pasado.
El Puerto de Los Ángeles esperaba la llegada de 80 barcos en mayo, pero el 20% de ellos se han cancelado. Los clientes ya han cancelado 13 salidas para junio.
La reducción de las importaciones procedentes de China en los barcos que llegan al puerto supera el 50%.

Los consumidores estadounidenses se enfrentarán a precios más altos y escasez de ciertos productos debido a la guerra comercial.
Los importadores y minoristas no están dispuestos a pagar el elevado coste de los aranceles, lo que ha llevado a una disminución en las entregas.
Algunos minoristas optan por pagar para almacenar sus productos en almacenes chinos porque es más económico que pagar el arancel.
Esto les permite evitar el elevado coste de los aranceles y mantener sus productos en stock.

Sin embargo, esto también significa que los consumidores pueden enfrentar una escasez de productos en el mercado estadounidense.
La incertidumbre económica y la volatilidad del mercado global afectará directamente a los consumidores estadounidenses y se enfrentarán a desafíos significativos en los próximos meses.
Con información de CNN