Según la página británica Mirror News, el primer selfie de la historia habría sido tomado en 1839 por Robert Cornelius. Se trata de un autorretrato que fue captado en un espejo.
Cornelius era un químico amateur y aficionado a la fotografía que vivía en Filadelfia y captó su autorretrato en la tienda de su familia.
Según la web, el fotógrafo aficionado usó el daguerrotipo, el primer tipo de fotografía que fue difundida en el mundo.
Al parecer Cornelius tuvo que permanecer al menos 15 minutos quieto para hacer al autorretrato, debido al mecanismo.
La autofoto de Robert se conserva en la Biblioteca del Congreso en Washington DC.
Con información de RPP.





