Una niña de cinco años estuvo aferrada a las rocas de un río por varias horas, antes de ser rescatada.
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La tarde del domingo 1 de junio, una niña de cinco años fue arrastrada por la fuerte corriente del río Los Tarros, en el municipio de San Pablo, San Marcos.
El incidente ocurrió luego de que familiares enviaran a la menor, identificada como Jimena Pablo Esteban de cinco años a bañarse en un riachuelo poco profundo cerca de su vivienda.
Sin embargo, la situación cambió repentinamente cuando comenzó a llover y el cauce del agua creció con fuerza, arrastrando a la niña al menos cien metros desde el punto donde desapareció.
Alarmados por lo sucedido, testigos alertaron a las autoridades, lo que dio inicio a un operativo de búsqueda y rescate liderado por los Bomberos Municipales Departamentales.
El equipo realizó una exhaustiva labor durante varias horas hasta que, finalmente, cinco horas después del incidente, localizaron a Jimena con vida. La menor se encontraba aferrada a unas rocas a la orilla del río, resistiendo con valentía pese a las difíciles condiciones.
Al ser rescatada, Jimena presentaba síntomas de hipotermia, golpes fuertes en la cabeza, baja saturación de oxígeno y presión arterial elevada, según indicó una paramédico en el lugar.
De inmediato, recibió atención prehospitalaria y fue trasladada de emergencia al Hospital Nacional La Montaña, en Malacatán, donde actualmente se reporta estable.
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