Conoce la historia del cronista Óscar Fajardo Gil que ha sido voz y memoria de Amatitlán desde 1976
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Con casi medio siglo de labor ininterrumpida en los medios de comunicación, el amatitlaneco Óscar Fajardo Gil, nombrado por la Municipalidad como el "Cronista de la Ciudad de Amatitlán" en agosto 2014, es un referente del pueblo pepitero.
En 49 años de trayectoria como comunicador social, ha marcado una huella profunda en la radio, la televisión, la prensa escrita y el periodismo deportivo nacional, pero sobre todo local.
Una vocación compartida con su formación como perito agrónomo egresado de la Escuela Nacional Central de Agricultura, en 1982; y estudios superiores de fitotecnia, gerencia y medios de comunicación.
La carrera de Fajardo Gil comenzó el 19 de octubre de 1976, cuando con apenas 12 años realizó su primera narración en el Campeonato Navideño de Baloncesto.
Desde entonces, su voz ha acompañado a generaciones enteras, convirtiéndose en un referente nacional gracias a su participación en reconocidas cadenas radiales como Emisoras Unidas, Radio Cadena Sonora, TGW, Mundial, Corporación Radial del Norte, entre muchas otras.
Su presencia también se ha extendido a la televisión, participando en programas y transmisiones en distintos canales, además de ser uno de los fundadores de Lago TV, el primer canal de televisión por cable de Amatitlán, en 1995.
Su gran pasión
En la prensa escrita, ha sido pieza clave en la creación y colaboración de diversos medios, como el periódico Nuestro Pueblo (1998), la revista Panorama (2001), Mengala (1995), y numerosos aportes a periódicos de circulación nacional desde 1985; así como a través del blog Lo Mejor de Amatitlán.
"Me gustan escribir y tengo 14 libros de mi autoría. Todas mis vivencias y memorias están en mi libro Crónicas del Micrófono y un chin de otras salsas, un recorrido íntimo como narrador, periodista y amante de la comunicación" resalta Gil.
Otros títulos de obras publicadas son: Luces de Pampichí, Tierra de Amatles, Crónicas de Nuestro Pueblo, Palabreando en Bicicleta, y Crónicas de Pepitoria y Mazapán, este último publicado en febrero de este año.
"Estoy dejando un legado para las futuras generaciones de comunicadores en el país, mi compromiso siempre es con la verdad, el deporte y la identidad local, de lo cual me siento orgulloso por mis raíces. Seguiré escribiendo hasta donde Dios me lo permita en esta tierra", finaliza el comunicador.
