El Campo Xan, operado por Perenco desde 1985, iniciará el cierre de 54 pozos petroleros el próximo 12 de agosto, al concluir el contrato vigente con el Estado. La empresa canadiense ha manifestado interés en encargarse del proceso y conversó con Soy502 sobre su propuesta.
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El Campo Xan, en donde opera la empresa Perenco, iniciará un proceso de cierre de 54 pozos petroleros a partir del 12 de agosto próximo, cuando termine el contrato que la compañía firmó con el Estado de Guatemala. Contrato que estuvo en operaciones desde 1985.
La decisión para cerrar los pozos fue publicada el pasado 16 de julio en el Acuerdo Ministerial Número 207-2025/SG, por el Ministerio de Energía y Minas (MEM). El Campo Petrolero Xan está ubicado en el bloque H-2-84 del municipio de San Andrés, Petén. El documento establece que el MEM deberá realizar la contratación de estos servicios en un plazo que no exceda los 45 días.
En este sentido, la empresa canadiense SIMMONS HOLDINGS EDECO, compañía con experiencia en extracción de petróleo, cierre de pozos, restauración y mitigación ambiental para la industria de los hidrocarburos, ha manifestado interés en realizar el cierre de los pozos para Guatemala.
"Los ojos del mundo en Guatemala"
Rob Matheson, Socio Director de SIMMONS HOLDINGS, visitó Guatemala en los últimos días para sostener reuniones de alto nivel con el ministro de Energía y Minas; y a otros funcionarios, a quiénes se les hizo una invitación para visitar pozos petroleros cerrados en Canadá. Durante su visita, Matheson habló con Soy502 sobre la propuesta.
Para Matheson, el cierre del Campo Xan es tan importante que los "ojos del mundo están puestos en Guatemala. Vemos una situación en la cual los intereses económicos del país tienen que estar balanceados con los requerimientos ambientales de un área protegida y, además, los intereses locales de las comunidades que han tenido un impacto en el área donde se ha llevado a cabo la actividad petrolera", comenta.
SIMMONS HOLDIGS, comenta su Socio Director, cuenta con más de 60 años de experiencia, no solo en la explotación petrolera, sino en la prestación de servicios para la gestión y manejo del medio ambiente y recuperación de proyectos petroleros en países como Gran Bretaña, México, El Salvador, naciones en Asia del Este y Europa.
"La empresa canadiense está acostumbrada y regida para trabajar con los estándares globales. Canadá es el líder a nivel mundial en el manejo de cierres de operaciones petroleras y manejo de gestiones ambientales alrededor de la industria petrolera", comenta Matheson.
Cabe destacar que la industria petrolera en Canadá ha perforado más de 630 mil pozos petroleros desde la década de 1950 y de los cuales más de 100 mil pozos han sido cerrados de forma segura. Matheson asegura que esta experiencia ha generado que la industria petrolera de este país tenga uno de los marcos los marcos regulatorios y prácticas de cierre técnico de pozos petroleros y recuperación ambiental más sólidos del mundo.
10 millones de barriles
Como se ha mencionado, el Campo Petrolero Xan ha sido explotado desde 1985 y durante el tiempo transcurrido ha extraído el 95% del petróleo que se encuentra en el área. Sin embargo, el 5% restante son más de 10 millones de barriles, una reserva considerable la cual, según Matheson debería continuar usándose para la producción de asfalto en Guatemala, debido a que el crudo del país tiene una calificación de 14 API, que significa un petróleo crudo pesado, que no es apto para refinarse.
"Hay un valor económico ahí muy importante que se debe tomar en consideración y, para que no se desperdicie, porque si cierra y no se explota, en sí mismo hay una pérdida, tanto para el Estado como para quien estará generando el cierre. Hay que considerar también otros aspectos importantes: darle mantenimiento y tomar una decisión de qué se hará con el oleoducto, con la refinería y con la terminal de explotación", comenta empresario.
El experto añadió que Perenco representa el 94% de la industria petrolera de Guatemala. Entonces, si no existe un plan que cubra el cierre de los pozos, la situación del oleoducto, la refinería y la terminal, se acaba todo. Termina la industria petrolera sin que haya un plan adecuado.
Explotar el petróleo y cerrar los pozos
En este sentido, Matheson lanza una propuesta a Guatemala. "La intención es que esto no le cueste al Gobierno, sino que, más bien, la compañía pueda financiar el cierre de las operaciones con la extracción del petróleo mismo. En caso contrario, pues, sería sufragado con los impuestos de los guatemaltecos".
El empresario explica que han creado un modelo financiero, sujeto a negociación con el Gobierno.
"No funcionaríamos como una compañía de petróleo, donde los ingresos de petróleo se trasladan directamente a los beneficiarios primarios del Gobierno de Guatemala. Es una explotación petrolera, en donde las utilidades van en primer lugar para el concesionario, para la compañía. En este caso, el mayor beneficio iría para el Gobierno y posteriormente para el concesionario. De manera que sea un gana-gana, pero específicamente la intención del lucro es distinta a que si lo hicieran eminentemente como una explotación petrolera, considerando que esto es un abandono y cierre de campos", señala Matheson.
Añade que el plan incluye la recuperación de los humedales y una restauración ambiental total en el área. En total, calculan que el tiempo estimado del cierre podría ser de entre 6 y 8 años.
Costos y ahorros
El Ministerio de Energía y Minas estima que en el Campo Xan se encuentran un total de 60 pozos. Incluso, se especuló que el costo total sería de US$50 millones de dólares (alrededor de Q383.7 millones). Sin embargo, SIMMONS establece que el costo podría ser menor.
Matheson señaló que el costo por cierre de cada pozo sería de entre US$400 mil (unos Q3,070 millones) a US$500 mil (Q3,837 millones), tomando en cuenta que son solo cifras preliminares, ya que faltaría determinar el estado de cada pozo y otros costos que podrían generarse debido a las condiciones en las que se encuentren las instalaciones.
Con esos datos, el costo total sería de un aproximado de US$30 millones de dólares (unos Q230.2 millones). Este sería el costo, tomando en cuenta que la empresa, si le fuese otorgado el contrato, vendería el petróleo restante del área. Con eso, asegura Matheson, el Estado estaría ahorrándose alrededor de US$50 millones.
"Es posible que cueste más de eso, dependiendo de cuáles son las expectativas que pida el Gobierno, pero con el modelo de autofinanciamiento que se propone, el ahorro para el Gobierno sería de 50 millones", explicó el empresario.
Además, comparó que el costo de cierre de un pozo petrolero en Canadá es de tan solo US$65 mil, debido a las condiciones en las que funciona la industria petrolera en ese país, que pose en la actualidad la tercera reserva de crudo más grande del mundo. "Una vez se abre un pozo, se hace un plan para su cierre inminente. Eso abarata los costos", dijo.
Riesgos y posible vandalismo
El contrato vence el próximo 12 de agosto y aunque el MEM ha indicado que mantiene comunicación constante con Perenco, principalmente porque esta ya tiene meses de no extraer petróleo, una de las principales preocupaciones tanto de los posibles inversionistas como de la población es el abandono de las instalaciones de la petrolera.
"Los riesgos son muy grandes si no se toman decisiones rápidas, oportunas y correctas. Podríamos caer en situación de vandalismo, van a comenzar a robarse las piezas, componentes, el metal. Si no se protege el oleoducto, la reconstrucción de este, si lograra estar dañado, que sucedería ante un abandono sin un cierre técnico rápido, costaría aproximadamente US$1 mil millones. Lo mismo podría suceder con los pozos petroleros, que ante el caso de saqueo y de robos, se pueden producir fugas de petróleo y ahí sí un daño ambiental masivo", comentó Matheson.
MEM ha recibido asesorías
El MEM aseguró que en mayo de este año, personal de Petróleos de México (Pemex) vistió las instalaciones en el Campo Xan con el objetivo de brindar asesoría técnica para desarrollar el cierre, desmantelamiento y disposición final que debe aplicarse a la infraestructura y equipos del campo.
El MEM confirmó que ya han elaborado el inventario de bienes que la empresa Perenco dejará en favor del Estado guatemalteco, pero aún están en proceso de clasificación de los bienes, para determinar el valor de los mismos.
Carlos Alberto Ávalos, viceministro de Energía, explicó durante una citación en el Congreso que, desde abril de 2024, se empezó a establecer el plan y cronograma para el cierre de los pozos que funcionan en el Campo Xan.
También mencionó que existe una mesa interinstitucional en la cual participan entidades como el Ministerio de Ambiente y el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap).
La historia del contrato de Perenco
El Gobierno de Guatemala, a través del MEM, firmó el Contrato de Operaciones Petroleras de Explotación 2-85 el 5 de agosto de 1985 con las empresas Hispanoil y Basis Petroleum International Limited (Basic Resources).
Luego, en 1986, la empresa Hispanoil se retiró del país, dejando solo a la empresa Basic Resources operando hasta el 2001, en ese mismo año la compañía petrolera Perenco de origen franco-británico tomó el contrato 2-85 e inició la explotación petrolera.
En el 2010 vencía el contrato, sin embargo, el 22 de julio de 2010 con el Acuerdo Gubernativo 214-2010, otorgado por el entonces presidente Álvaro Colom, ratificado por su Consejo de Ministros, aprobóla modificación, ampliación y prórroga del contrato de operaciones petroleas del Contrato de Operaciones Petroleras de Explotación 2-85 por 15 años más.
El pasado 3 de abril de 2024, mediante su cuenta oficial de X el presidente Bernardo Arévalo publicó: "Que quede claro: el contrato de la empresa petrolera Perenco en Laguna del Tigre, que vence en 2025, no va a ser renovado".
En el mismo mensaje, el mandatario afirmó que "las instituciones del gobierno velarán por el cierre ordenado de las operaciones de Perenco en Laguna del Tigre y no se permitirán operaciones petroleras en ningún área protegida del país".
Según el artículo 6 del Acuerdo Gubernativo 214-2010, la prórroga del Contrato de Operaciones Petroleras de Explotación 2-85 entró en vigencia el 13 de agosto de 2010, por lo que su vencimiento está previsto para el 12 de agosto próximo.
