El servicio para despedir a la diva del cine de oro mexicano tuvo momentos complicados por la gran cantidad de reporteros que buscaban las reacciones de los presentes.
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El último adiós para Silvia Pinal fue caótico para la familia y amigos debido a la presencia de diversos medios periodísticos en el ingreso a la agencia funeraria donde se llevó a cabo la ceremonia privada antes del homenaje que se realizará este 30 de noviembre en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México.
"Estamos en eso ahorita porque queremos que haya mucha música, globos, sus rehiletes que tanto le gustaban, alcatraces, girasoles, bueno, todo lo que podamos llenarle de flores y de música y de alegría para despedirla con su público", reveló Silvia Pasquel a la prensa.
Sin embargo, también hubo reclamos por el comportamiento de la prensa, que generó daños a la propiedad privada.
Los propios hijos de Pinal tuvieron que pedir que se dejara de generar caos alrededor de ellos.
Previamente, Luis Enrique, quien llegó en moto, había tardado 10 minutos en recorrer los 20 metros que separaban la avenida de la entrada del estacionamiento, por la insistencia para que hablara.
"Son momentos difíciles para nosotros, ya he sentido mucha violencia, no es posible que se nos echen encima del carro", apuntó Alejandra Guzmán en su oportunidad.
*Con información de El Informador