En Manhattan se encuentra el misterioso rascacielos diseñado para resistir una bomba nuclear. Oficialmente es conocido como el "Long Lines Building".
Está conformado por 29 pisos y su altura es de 167 metros. Se encuentra al lado este de Church Street, entre las calles Thomas y Worth.
La peculiaridad más sobresaliente de este edificio es que en ninguno de los pisos hay una ventana lo que podría convertirlo en el edificio más triste de Nueva York.
Sin embargo, este rascacielos que fue construido en 1974 por el arquitecto John Carl Warneke, no solo es famoso por la ausencia de ventanas en su diseño, sino también por sus techos, muy altos, que soportan una gran cantidad de peso por metro cuadrado.
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Esta fortaleza puede sobrevivir a las consecuencias de una explosión nuclear y seguir funcionando sin conexión hasta por dos semanas. Además, contiene sus propios suministros de gas y agua.
Originalmente se creo para albergar los intercambios de operadores de AT&T para sus conmutadores telefónicos y equipos de larga distancia. Hoy continúan con ese propósito almacenando una parte del procesamiento del centro de datos de la empresa.
Hace unos meses, el actor Tom Hanks publicó en su cuenta de Twitter el pánico que que había sentido al estar cerca de esta misteriosa arquitectura
This is the scariest building I've ever seen! WTF goes on inside?? Hanx. pic.twitter.com/nXeUI64rXm
La revista electrónica The Intercept publicó que este edificio también alberga equipos para la controvertida recopilación de datos gubernamentales y escuchas telefónicas, conocida en clave como TITANPOINTE.
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*Con información de gizmodo
