Para evitar riesgos en los traslados desde Zacapa hasta Chiquimula, el SP pidió que audiencias contra Fernanda Bonilla sean en videoconferencias.
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La Dirección General del Sistema Penitenciario (DGSP) solicitó al Juzgado de Primera Instancia de Chiquimula que las audiencias judiciales de María Fernanda Bonilla Archila se realicen por videoconferencia desde el Centro de Detención Jocotes, en Zacapa, donde actualmente permanece recluida.
Bonilla Archila es señalada como la principal sospechosa del asesinato de Melissa Palacios, ocurrido en julio de 2021.
La solicitud fue emitida mediante el oficio 1591-2025 y enviada al juzgado el pasado 24 de abril. Hasta el momento, no se ha resuelto la petición.
Referente a ese oficio, el Sistema Penitenciario explicó a Soy502 que "se han iniciado las gestiones para que las audiencias judiciales de la privada de libertad sean por medio de videoconferencia, de manera que pueda reducirse el riesgo para la privada de libertad, así como para los impartidores de justicia y la población en general que acude a los juzgados, así como para que se utilicen menos recursos públicos para esas actividades".
Marcha de la familia Palacios
El sábado 4 de mayo, la familia de Melissa Palacios organizó una marcha pacífica en la que exigieron justicia y reiteraron su petición de que el proceso judicial ya no sea conocido en Chiquimula, sino que sea trasladado al Juzgado de Mayor Riesgo en la Ciudad de Guatemala.
Durante la actividad, denunciaron intimidaciones por parte de hombres armados que han llegado a custodiar a los acusados y señalaron que dudan de la imparcialidad de las autoridades judiciales locales.

El asesinato de Melissa Palacios
Melissa Palacios fue reportada como desaparecida el 4 de julio de 2021, luego de asistir a una celebración de cumpleaños en San Jorge, Zacapa. Su cuerpo fue localizado al día siguiente en el municipio de Río Hondo, con signos de violencia.
Según la investigación del Ministerio Público, la acusación se basa en mensajes de WhatsApp entre los sospechosos.

Sin embargo, el juez a cargo del caso no aceptó las pruebas presentadas y modificó los cargos a favor de los acusados. El proceso sigue sin avanzar.
El juez José Maximino Morales González, en diciembre de 2021, modificó los cargos iniciales de asesinato a homicidio en estado de emoción violenta para María Fernanda Bonilla, y a encubrimiento propio para José Luis Marroquín Ovalle, el otro acusado, lo que ha generado gran preocupación en la sociedad guatemalteca.