Autoridades elaboran un informe sobre los daños ocasionados por manifestación del STEG en el Palacio Nacional de la Cultura.
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El Ministerio de Cultura y Deportes (MCD) trabaja en la elaboración de un informe técnico sobre los daños que ocasionados al Palacio Nacional de la Cultura debido a la manifestación de integrantes del Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras de la Educación de Guatemala (STEG).
Según el MCD dicha estructura está clasificada como Patrimonio Cultural de la Nación con categoría patrimonial "A", esto lo convierte en uno de los bienes culturales e históricos más importantes del país.
Dicho reporte, podría adjuntarse a la denuncia interpuesta por las autoridades en el Ministerio Público (MP).
Tras el desalojo de los manifestantes que acampaban en los alrededores del Palacio Nacional de la Cultura, el MCD informó que "en su calidad de ente rector del patrimonio cultural de la nación" llevó a cabo una inspección para verificar el estado del edificio.

Asimismo, la Unidad de Comunicación Social del MCD indicó que "la restauración integral del Palacio Nacional de la Cultura requerirá de un proceso especializado, meticuloso y prolongado" y se podrá iniciar cuando se cuente con el diagnóstico detallado de daños.

Denuncia
El pasado 11 de junio, el MCD informó que colocó una denuncia en la Fiscalía de Delitos contra el Patrimonio Cultural del MP por los daños que al inmueble, asimismo, concretó dos ampliaciones de la misma ese mismo mes.
Según la cartera en mención, luego de las inspecciones preliminares se determinó que hay daños en la herrería de ventanas y puertas, barandas, faroles y luminarias instaladas en las paredes del edificio provocados por el amarre de lazos utilizados para sujetar lonas, carpas y otros materiales.
También se identificó que la instalación indebida de anclajes en fisuras preexistentes, incrementó el daño a la fachada.

La MCD explicó que esta situación genera "una tensión perjudicial que acelera el desgaste y deterioro del diseño y la construcción original del edificio".
Asimismo, también se determinó que existían instalaciones eléctricas no autorizadas y acumulación de desechos sólidos y realización de necesidades fisiológicas en áreas cercanas al edificio, lo que generó olores fétidos y el deterioro del inmueble y su entorno.




